MOOC ¿a favor o en contra?

 

Este es un artículo sobre el que se habla sobre los MOOC. En él, el autor abre un debate y analiza las ventajas y desventajas de éstos. Pero primeramente, ¿qué son los MOOC?

“MOOC, acrónimo en inglés de Massive Open Online Course y traducido al castellano como Cursos en Línea Masivos y Abiertos; es una modalidad de educación abierta, la cual se observa en cursos de pre grado ofrecidos gratuitamente a través de plataformas educativas en Internet, cuya filosofía es la liberación del conocimiento para que este llegue a un público más amplio”

Para que la enseñanza a distancia pueda ser considerada MOOC debe cumplir los siguientes requisitos:

·         Ser un curso: debe contar con una estructura orientada al aprendizaje, que suele conllevar una serie de pruebas o de evaluaciones para acreditar el conocimiento adquirido.

·         Tener carácter masivo: el número de posibles matriculados es, en principio, ilimitado, o bien en una cantidad muy superior a la que podría contarse en un curso presencial. El alcance es global.

·         En línea: el curso es a distancia, e Internet es el principal medio de comunicación. No requiere la asistencia a un aula.

·         Abierto: los materiales son accesibles de forma gratuita en Internet. Ello no implica que puedan ser reutilizados en otros cursos.

(Wikipedia)

El autor examina las ventajas que estos cursos pueden tener. Entre ellas destaca que son abiertos por lo que todo el mundo puede apuntarse y con la garantía de poder contar con las mejores universidades pero… ¿es tan buena idea como parece? no para el escritor.

Él analiza una por una las iniciales de este acrónimo, explicando así su visión del mismo.

 

Ya que estos cursos son abiertos, la heterogeneidad de los participantes hace que no todos tengan los mismos intereses, ya que puede haber perfiles totalmente diferentes  en cuanto a edad, profesión, etc. lo que no se pueden cumplir las expectativas ni satisfacer a todos de la misma manera.  Esta masificación, de ahí la “M”, hace que nos planteemos si la variedad de estos grupos es tan buena como se plantea. Y además, como bien dice el artículo, la tasa de abandono es muy alta, del 90%.

Otra desventaja que el escritor plantea es la duda sobre el concepto “Open”. Cierto es que los cursos son gratuitos, pero si quieres obtener un diploma que acredite tal curso, tienes que pagar.

La otra “O” que proviene de on-line, hace que el participante de estos cursos esté sujeto a una rigidez y a poca flexibilidad ya que tienes que seguir una estructura determinada y estar pendiente de la página continuamente para estar al corriente de las novedades por lo que la gente que esté trabajando o muy ocupada no sale beneficiada.

Y por último, el autor analiza la letra “C” correspondiente a curso, en la que la diferencia fundamental es el uso obligatorio de los vídeos. Como dice el artículo “la “c” de curso, parece que ha nublado la vista a todos y lo que hace es traspasar el modelo de cursos online a un MOOC”.

 

El debate está servido. Y tú, ¿qué opinas?